¿Cómo reparar y mantener una puerta corredera?
En sus armarios y roperos, para separar sus habitaciones o a nivel de las ventanas, las puertas correderas son apreciadas por el espacio que ahorran y son habituales en las construcciones recientes. A pesar de su practicidad, a veces pueden bloquearse o estropearse. CRH en Jette y Bruselas le explica cómo un mantenimiento regular y algunos trucos pueden ayudarle a reparar usted mismo este tipo de puertas.
Aspirar el mecanismo de deslizamiento
Si la puerta se atasca en los raíles, pasa una aspiradora por los raíles para eliminar el polvo. Compruebe los bordes y las hendiduras y aspire alrededor de las ruedas de cada puerta para eliminar el polvo con eficacia. Utiliza una boquilla estrecha o plana y un cepillo de dientes para eliminar todo el polvo posible.
Limpie bien los raíles
Una vez que hayas terminado de aspirar, limpia a fondo los raíles. Ármate con una esponja y un poco de agua jabonosa. Cepilla bien el interior del raíl para aflojar el polvo incrustado que se haya resistido al aspirado. Una vez más, utiliza el cepillo de dientes para fregar los rincones más difíciles de alcanzar. Por último, limpie los rieles con un paño limpio y seco.
Lubrique su puerta corredera
Para evitar atascos, lubrique generosamente los rieles. Esto evitará que el mecanismo de deslizamiento chirríe y alargará la vida útil del carril, las ruedas y los raíles. Una acción sencilla que requiere el uso de un producto adecuado como WD-40.
Compruebe los mecanismos
Si el problema persiste a pesar de estas precauciones de mantenimiento y de una limpieza meticulosa, compruebe el funcionamiento y la integridad de los raíles, las ruedas, el asa y otros componentes. Si alguno de ellos está defectuoso, puede ser necesario sustituirlo. Puede pedir consejo a un especialista.
Recurra a nosotros para todas sus necesidades de reparación.